Muchos proveedores de césped artificial y fabricantes vieron
beneficios este año, tras una serie de sequía al comienzo del verano, seguido
por las inundaciones al final del verano.
La calidad de la hierba se puso tan mal en algunos lugares,
que provocaron un mantenimiento excesivo, concejales pueblos votaron por la implantación
de césped artificial en los parques públicos y rincones cerca de monumentos. En
la actualidad cuesta miles de euros cada año arreglar las zonas de tierra
desnuda y los dañados por la afluencia de visitantes.
También hay una creencia de que el césped artificial puede
ser más ecológico que su contraparte natural.
¿Qué más se
puede hacer para ayudar al medio ambiente?
Conservacionistas
recomiendan la introducción de comederos de aves y las fronteras herbáceas
cuando sea posible para compensar cualquier posible daño ambiental al
reemplazar el césped natural con los artificiales.
Métodos de cultivo
orgánicos, como el compostaje y la reducción del uso de pesticidas también
tendrán un impacto positivo en la vida silvestre cercana.
La conservación del agua y las condiciones climáticas
extremas están aumentando, convirtiéndose en una preocupación en todo el
continente. Así que a pesar de conseguir una fuerte reacción de la gente, ya
que la calidad de la hierba sintética sigue mejorando y más opciones estén disponibles,
estas superficies sintéticas se convertirán en una opción más aceptable.
Si desea más información les dejo un enlace. http://www.livingreen.com.mx/pasto_artificial.php